Estudiantes del CCH Naucalpan toman rectoría, piden acciones contra porros.



Esta tarde, un grupo de estudiantes del CCH Naucalpan, junto con más de un centenar de universitarios, tomaron las instalaciones de la dirección general del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) de la UNAM. La toma comenzó a las 17:15 horas con la exigencia de que se realice una mesa de diálogo mañana jueves a las 13:00 horas, a la que deben asistir el director general Benjamín Barajas, el director del plantel Naucalpan Keshava Quintanar Cano y autoridades de la Rectoría.

La protesta inició con una marcha desde el parque de La Bombilla a las 13:15 horas, llegando a las 14:00 horas a las oficinas de la dirección general del CCH en Ciudad Universitaria. Al llegar, encontraron las rejas encadenadas. Los estudiantes de Naucalpan leyeron su pliego petitorio y esperaron tres horas a que el director general Barajas lo recibiera, durante las cuales conversaron con autoridades del CCH y un representante de Rectoría.

En todo momento, los estudiantes insistieron en que el director general debía presentarse para recibir el documento. Finalmente, Arturo Ruíz, representante de Rectoría, propuso realizar una mesa de trabajo el viernes a las 10 de la mañana para analizar el pliego petitorio. Sin embargo, los estudiantes modificaron la propuesta, exigiendo que la mesa de trabajo se realice el viernes a las 13 horas en la dirección general de los CCH en CU, con difusión en redes sociales y la asistencia de los directores general y de Naucalpan.

Momentos después, los estudiantes cambiaron nuevamente su planteamiento, afirmando que la mesa de trabajo debe realizarse mañana con la participación de ambos directores, difusión en redes sociales y abierta a la comunidad universitaria, padres de familia y estudiantes del CCH. Ante la negativa de las autoridades para aceptar esta demanda, los estudiantes procedieron a tomar las instalaciones de la Dirección General de CCH.

Durante la marcha, cuando se leía el pliego petitorio, un grupo de estudiantes universitarios vestidos de negro y con el rostro cubierto abrió el portón a patadas, impidiendo la entrega formal del documento.

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